miércoles, 20 de enero de 2016

¡Bfff! Principiantes...



¿En serio? ¿Eso es lo que tú consideras una risa malévola?

ESTO ES UNA RISA MALÉVOLA!!!


Pd: Si alguna vez este genio del mal llega a conquistar el mundo me uno a sus filas sin dudarlo.


sábado, 28 de noviembre de 2015

¿Y ahora que?


Buenas babiler@s!!

Vengo especialmente contento hoy. Resulta que ya soy licenciadooooooo!!

Sí coleguis, carrera acabada. Ayer tocó hacer la exposición del Trabajo Final de Carrera, ese proceso totalmente necesario en el cual tres profesores de repente son un Tribunal y te miran mientras tú sudas, tiemblas, ríes, lloras, dices 200 palabras en 5 segundos y luego te tiras otros 5 totalmente en blanco sin recordar ni una sola palabra del diccionario de la R.A.E., miras tu PowerPoint pensando "estoy casi seguro de que esa diapositiva no estaba ayer" y demás paripé.

No se si os habéis hecho la idea ya, pero no era un proceso al que le tuviera demasiado amor. Tampoco es que me quitara el sueño, pero era como un mosquito de estos que te pasan volando cerca de la oreja y te gritan "Bzzzzzzzzzzzzzzzzzzz"  cuya traducción Mosquitense-Español es "En cuanto creas que me he ido te voy a reventar tanto que te voy a dejar la piel que vas a poder escurrir arroz en ella Madafaka".

Sin mucho estrés previo, cuando me quise dar cuenta ya estaba en el LicenciateYourself Day. Me tocaba compartir agonía con una de las integrantes femeninas de La Forta: La Golfa.
Estaba también mostrando apoyo incondicional el gran Rubinho, dejando claro que su compromiso con La Forta es total y devoto.

Yo: "¿Cómo va la cosa? Yo expongo a las 10:45".

Mujer desconocida: "Se ve que van con retraso. Todavía no ha entrado el de las 10:00"

10 minutos después, sale una chica que llevaba por maquillaje unos ojos vidriosos y la mandíbula todavía tensa de los nervios. Le empiezan a dar la enhorabuena, todo ha ido bien. Mientras la miro pienso que, si todo va bien, en unas horas seré yo el que estará recibiendo esos fríos halagos de parte de profesores semidesconocidos.

En esas estaba cuando uno de los profesores se gira y me dice:

- "Te toca. Ves entrando y preparándote todo".

- "Disculpe señor, yo soy el de las 10:45 y ,según me han comentado, las exposiciones no van al ritmo de lo previsto así que debe haber alguna presentación previa a la mía...".

- "No. Trabajo con título 'Análisis y propuesta de mejora de la desviación de la planificación en una empresa del sector de la automoción'... ¿Es el suyo?".

- "".

- "Es su turno entonces".

Miro a la señora desconocida que me había mentido así sin razón aparente in all my face, quien me sonríe con cara de "Upsss, pues no estaba yo muy enterada" mientras yo le devuelvo la mejor de mis sonrisas:


A continuación entré e hice mi presentación lo mejor que pude dados los cada vez más preocupantes síntomas que predecían la parada cardíaca inminente.

Una vez superado el proceso, mucho más simple de lo esperado, imaginado y soñado, no sentí ninguna sensación diferente. Nada de quitarse un peso de encima. Nada de dejar atrás una etapa de tu vida y ver como otra comienza, extendiendo su sinuoso y desafiante camino ante tus ojos. Nada de melancolía y tristeza por el fin de la etapa universitaria.
Pensé que mi incapacidad para sentir en ese momento estaba íntimamente relacionada con la incomodidad que me suponía vestir zapatos, pantalón y camisa. Por mucho que avance la humanidad y la tecnología, pocas cosas se han conseguido que sean mejores que pantalón de chándal. En mi caso, por lo visto, este pedazo invento también funciona como catalizador de sentimientos.

Tras echar la primera cerveza del día con Rubinho, acudimos a dar todo nuestro apoyo en la presentación de la Golfa, quien vino acompañada de otra LadyForta: La futura señora Weasley.

Hay que decir que la Golfa lo bordó. Presentación brillante de un proyecto currado e interesante.
Dos de los miembros del tribunal se deshicieron en halagos hacia su buen hacer. Sin embargo la tercera profesora, desconocida para nosotros, parecía haber leído el proyecto con lupa buscando hasta la más mínima incongruencia, hasta la última coma perdida, y así nos lo hizo saber a todos los allí presentes. Poco a poco fue presentando objeciones hacia el trabajo de la Golfa con exigencias más propias de un informe desarrollado por una prestigiosa consultora que de un TFC.
Mientas tanto, Rubinho, Miss Weasley y yo la mirábamos con cara neutra, pero transmitiendo unas energías negativas hacia su persona que trastocaron los chakras de todo su árbol genealógico.

Finalmente, y pese a la agria soberbia disfrazada de perfeccionismo de la bruja de turno, la Golfa consiguió la excelente calificación que sin duda merecía.

Llegaba el momento de celebrar, de dejar de lado los formalismos y dejarse llevar por la alegría que contagiaban los cada vez más compañeros que me acompañaban. Let's go!

Por todo ello y por mucho más digo esto sabiendo que, aunque he acabado la carrera, esta no será la última vez que lo diga.

FORTA, SOMOS GRANDES!!!






Annie Hall



"I, I thought of that old joke, y'know, the, this... this guy goes to a psychiatrist and says, "Doc, uh, my brother's crazy; he thinks he's a chicken." And, uh, the doctor says, "Well, why don't you turn him in?" The guy says, "I would, but I need the eggs." Well, I guess that's pretty much now how I feel about relationships; y'know, they're totally irrational, and crazy, and absurd, and... but, uh, I guess we keep goin' through it because, uh, most of us... need the eggs."